El pasado miércoles y
jueves se efectuaron las prometidas elecciones presidenciales. Los resultados
oficiales serán emitidos este martes
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
[DEMOCRACIA]
50 millones de egipcios
estuvieron habilitados para ejercer el pasado miércoles y jueves su derecho al
voto en las primeras elecciones que pueden calificarse como libres en la
historia de esa nación árabe, con el propósito de elegir, de entre 13 candidatos,
quién será su próximo presidente. En estas elecciones hay de todo, desde las
posturas más liberales y laicas, hasta las más islamistas.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Una mujer egipcia chequea
sus datos antes de votar en un centro electoral, durante la primera vuelta de las
elecciones presidenciales, en la ciudad de El Cairo, capital de Egipto
El 25 de enero de 2011, los
egipcios decidieron tomar las calles de las principales ciudades de su país,
siguiendo el ejemplo de los tunecinos, quienes pocos días antes, el 14 de
enero, lograron, tras intensas protestas originadas en la inmolación del joven
Mohamed Bouazizi, que el presidente Ben Alí renunciara a su cargo tras casi 24
años de gobierno. Durante 18 días se mantuvieron protestando los egipcios,
hasta que el 11 de febrero forzaron a Hosni Mubarak a renunciar, tras haber
pasado más de 30 años en el poder. Era el momento de máximo clímax de una serie
de revueltas en el norte de África y el Medio Oriente que algunos han
denominado “La primavera árabe”. Desde aquel incidente han transcurrido ya poco
más de 15 meses, tiempo en el que aumentó el ya de por sí gran poder que
ejercen las fuerzas armadas sobre el sistema político de Egipto. Se pasó del
autoritarismo personalista de Hosni Mubarak a una transición en la que hubo una
alianza tácita entre el Consejo Militar de Gobierno, encabezado por el Mariscal
Hussein Tantawi, y los Hermanos Musulmanes, principal grupo político, de
tendencia islamista, de ese país. A pesar de las trabas y los obstáculos, el
proceso de transición ha ido avanzando, quizás muy lentamente para algunos. Las
elecciones presidenciales realizadas esta semana, cuyos resultados conoceremos
este martes, son el segundo paso en esa transición, tras los comicios
legislativos que se celebraron entre noviembre del año pasado y marzo de este
año, en los cuales los grupos islamistas, como los Hermanos Musulmanes, de
tendencia más moderada, seguidos de cerca por los salafistas, mucho más
rigurosos, se hicieron con el control de las tres cuartas partes de los escaños
del Parlamento egipcio.
Los
asuntos por resolver por el nuevo gobierno, claves para la transición
Los egipcios, además de
decidir quien será su futuro presidente, están influenciados por una serie de
factores determinantes, los cuales han marcado de manera significativa este
proceso electoral. El primero de ellos, y sin duda el más importante, es el
relacionado con el modelo de Estado que quieren para el futuro, por lo que deben
decidir si mantienen la república laica, instaurada en 1952 tras la abolición
de la monarquía, o si por el contrario optan por una forma de gobierno
islámica. En segundo lugar, y aunque es un tema del cual ninguno de los
candidatos habla de manera directa, es sobre el rol que ejercerán de ahora en
adelante las Fuerzas Armadas de Egipto, y de manera especial, el poder que
detentarán los actuales miembros del Consejo Militar que gobierna el país.
Tercero, debe resaltarse que el presidente que resulte electo aún no tendrá
claras la totalidad de las funciones que ejercerá, ya que estas serán definidas
por una Constitución que aún no ha sido escrita, trabajo que ha sido
encomendado a una Asamblea Constituyente, electa por el Parlamento egipcio, y
conformada en un 70% por los Hermanos Musulmanes y los salafistas. En cuarto
lugar, el nuevo presidente deberá resolver los problemas de la creciente
inseguridad personal, las constantes manifestaciones callejeras y la grave
crisis económica producto de la caída de los ingresos provenientes del turismo.
La combinación de estos cuatro factores moldeará de ahora en adelante el
proceso de transición egipcia y determinarán si el mismo resulta exitoso o si
termina convirtiéndose en un fracaso.
Sin
favoritos claros, puede haber segunda vuelta entre islamistas
Para estas elecciones
presidenciales se habilitaron dos días de votación para facilitar a todos los
egipcios ejercer su derecho al sufragio. Se tiene previsto que el martes el
organismo electoral anuncie los resultados de esta primera vuelta electoral, y
si ninguno de los 13 candidatos logra obtener más del 50% de los votos, habrá
una segunda vuelta los días 16 y 17 de junio. Se han realizado varios sondeos
de opinión en Egipto, los cuales indican que cuatro candidatos, dos laicos,
vinculados al gobierno de Hosni Mubarak, y dos de tendencia islamista, son los
favoritos entre los egipcios. Estos estudios ubican en primer lugar a Amro
Musa, ex Secretario General de la Liga Árabe y ex Ministro de Relaciones
Exteriores de Hosni Mubarak, seguido muy de cerca por Abdel Abdulfutú, antiguo
Hermano Musulmán, apoyado por los salafistas y algunos sectores liberales,
Ahmed Shafiq, último Primer Ministro de Hosni Mubarak, y Mohamed Morsi, el
candidato oficial de los Hermanos Musulmanes. Tomando en cuenta los resultados
de las elecciones parlamentarias de hace 3 meses, en las que los Hermanos
Musulmanes y los salafistas concentraron el 70% de los votos, y de lo poco
fiables que resultaron las encuestas, que se habían realizado sólo en las
grandes ciudades, lo más probable es que haya una segunda vuelta entre los
candidatos islamistas Abdel Abdulfutú y Mohamed Morsi.
Una mujer egipcia vota en
un centro electoral, durante la primera vuelta de unas
históricas elecciones presidenciales, en la ciudad de El Cairo, capital
de Egipto.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Unos 14.500 jueces se
encargaron de supervisar la votación en 13.099 mesas electorales, siendo asistidos
por más de 65.000 funcionarios, mientras que cientos de ONG egipcias y
extranjeras realizan el seguimiento de las elecciones
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
“El Ejército está dispuesto
a enfrentar todas las eventualidades que puedan surgir. El recuento de los
votos se realizará en los mismos colegios de forma transparente”.
General Mohamed
Al Asar, miembro del Consejo Militar de Gobierno
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Los
islamistas controlan la Asamblea Constituyente de Egipto
El pasado 25 de marzo, el
Parlamento de Egipto votó para elegir a los 100 miembros de la Asamblea
Constituyente, la cual estará encargada de redactar una nueva Constitución para
ese país árabe. Aprovechando el hecho de que controlan las tres cuartas partes
del Parlamento egipcio, los Hermanos Musulmanes y los salafistas se hicieron
con 70 de los 100 miembros de la Asamblea Constituyente, que está integrada por
50 parlamentarios y 50 miembros de la sociedad egipcia. Entre los 50
parlamentarios escogidos, hay 25 de los Hermanos Musulmanes, 11 salafistas y 14
pertenecientes a otros partidos o independientes; por su parte, entre los 50
miembros representantes de la sociedad egipcia, hay profesores de derecho
constitucional, presidentes de partidos políticos, clérigos y religiosos,
economistas, y hasta un ex jugador de fútbol, estado 31 de ellos vinculados de
manera directa o indirecta a las fuerzas islamistas. Los grupos liberales
acusaron a los islamistas de querer imponer una Constitución acorde con su
ideología y no de consenso, por lo que recordaron que era necesario redactar
una Constitución para todos los egipcios, la cual tiene que incluir a minorías
importantes como los Coptos o los beduinos. Los liberales, que tenían 8 puestos
dentro de la Asamblea Constituyente, optaron por retirarse de ella.
Publicado en el Semanario 6to Poder / Año 2 Número 86 / 27 de mayo de 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario